TÍTULO ORIGINAL | Guess Who's Coming to Dinner |
---|---|
AÑO | 1967 |
DURACIÓN | 108 min. |
PAÍS | |
DIRECTOR | Stanley Kramer |
GUIÓN | William Rose |
MÚSICA | Frank DeVol (AKA Frank De Vol) |
FOTOGRAFÍA | Sam Leavitt |
REPARTO | Spencer Tracy, Sidney Poitier, Katharine Hepburn, Katharine Houghton, Cecil Kellaway,Beah Richards, Roy Glenn, Isabel Sanford, Virginia Christine, Alexandra Hay, Barbara Randolph |
PRODUCTORA | Columbia Pictures |
PREMIOS | 1967: 2 Oscars: Mejor actriz (Katharine Hepburn), guión original. 10 nominaciones 1967: Premios David di Donatello: Mejor producción, actor y actriz extranjeros |
GÉNERO | Drama. Comedia. Romance | Racismo |
SINOPSIS | Una joven de familia acomodada lleva a casa, para presentárselo a sus padres, a su novio, un médico negro con el que tiene la intención de casarse. A pesar de ser personas de ideas liberales, sus padres se sienten muy confundidos, especialmente el padre, que teme que un matrimonio semejante no traiga más que problemas a su hija. (FILMAFFINITY) |
Como comenté en la presentación, la película fue rodada en 1967, un periodo especialmente convulso de la historia americana, en plena la lucha de por los derechos civiles, tema que trata la película, y la Guerra Fría en todo el mundo. Cuatro años antes había sido asesinado John Kennedy, dos años antes Malcom X, y al poco de terminarla lo sería Martin Luther King; al año siguiente morirían también Bobby Kennedy y el Che.
Por ello, fue criticada tachándola de demasiado blanda y facilona. Se crítico por ejemplo, el alto estatus social de Sidney Poitier y su atractivo, a lo que respondieron los productores que justamente habían buscado dejar claro que el único motivo que se pudiera aducir contra la boda fuera la diferencia racial, quedando más patente el sinsentido.
Pero más allá de ello, la película me gusta especialmente porque creo que su planteamiento es de lo más acertado al situar como el quid de los problemas sociales, las relaciones personales. Así como en la anterior película que presenté, La costilla de Adán, se trataba el problema de género a través de la relación de una pareja, aquí se ve cómo esa pareja ha de enfrentarse al mundo. La respuesta, entiendo yo, consiste en que no se puede, ni más ni menos, que defender el valor de las personas, por encima de las diferencias, y la posibilidad y oportunidad de vivir juntos; de modo que cada vez más gente se conciencie de ello.
Gran elección. Se te ha olvidado comentar la bonita declaración de amor que es el último monólogo y toda la película en sí. S y K hicieron 9 pelis juntos y se quisieron durante 25 años. Esta fue la última después de mucho tiempo y a los pocos días murió él; ambos lo sabían, y ninguno de los dos pudo ver nunca la película terminada.
ResponderEliminarOs dejo un enlace a un blog donde se puede ver el final en castellano, único lugar en internet.
http://norbacultura-newculture.blogspot.com.es/2012/03/el-mejor-cine-adivina-quien-viene-esta.html
En este caso creo que el ponente tiene razón. En películas tan emocionantes, aunque es una pena perderse las flexiones de voz de Spencer, y siendo tan malos los subtitulso, es mejor verla doblada.
Gran pelicula si. Sobre el monólogo final se pasa mas de la mitad del monologo haciendo un resumen de la peli, no dice nada hasta la segunda mitad del monologo y luego dice cosas bonitas si, incluso para emocionarse uno pero no es un speech como para enmarcar.
ResponderEliminarMe quedaría con el gag del helado, muy gracioso.
Anecdota curiosa la de las gafas ;-)
Ricardo,y hablando del tema de que el prota es de clase alta y por eso el tema del racismo es la única pega, me chirria un poco la escena en la que la ayudante del servicio, la chica negra guapa, se va a la ciudad con el carnicero que es blanco. Ambos se van bailando despues de haberse lanzado un par de miradas muy explicitas... eso también puede ser algo así como "esta pareja interracial como son de clase baja, da igual, a nadie le importa pero a los señoritos, que no me los toque nadie". El problema racial es más propio de la clase alta en la peli?
ResponderEliminar¿K no pudo ver la peli terminada porque se emocionaba? Lo digo porque falleció en 2003.
ResponderEliminarFue bonito recordarla, hacía mucho que la había visto y casi se había borrado de mi quijotera.
jejeje (Ricardo hablando consigo mismo)
ResponderEliminarEstoy de acuerdo en el monólogo final. Una bonita declaración de amor que trasciende la pantalla.
Creo que lo mejor de la película es la interpretación de esos dos grandes actores clásicos, Tracy y Hepburn que llevan todo el peso de la narración. No están tampoco nada mal Poitier y la sobrina de Katharine, pero me quedo con el papel de la madre con esa lágrima contenida en cada plano y esa elegancia atemporal.
La historia es interesante, como interesante es el momento histórico que cuenta y que tan bien supo explicarnos Ricardo. Quizá es verdad que no se mojan demasiado con otros temas como la diferencia de clases o la diferencia de sexos, pero supongo que eso es otra historia.
Hace cuatro días del cuarenta y cinco aniversario del asesinato de M. Luther King, todavía muchos claman por la reapertura del caso y el esclarecimiento de muchos puntos oscuros. Un fragmento de la dura historia en la lucha por los derechos fundamentales y una buena película que retrata ese momento y, aunque hecho de menos una mayor implicación en el tema de la desigualdad, sí aprecio el enfoque del tema desde el amor y la cotidianidad. Como siempre Ricardo mostrándonos la cara esperanzadora de las relaciones humanas. Gracias.
Joste, lo del monólgo lo dices porque siempre te gusta llevar la contraria;)
ResponderEliminarLo de la sirvienta y el repartidor creo que es porque son jóvenes.
Y sí, Mariví se equivocaba en lo de las gafas.
Y Xabi y Angélica siempre tan acertados, ciertamente, una gran película.
Pues eso...lo de la gafas.
ResponderEliminarPor cierto ¿Qué es?