En el cineguchi de ayer, hice una pequeña retrospectiva de cómo encontré el manga y qué significó para mi.
Aunque realmente encontré el manga sin querer cuando en la tele ya se podía ver Heidi, Marco o Sherlock Holmes (todo esto de la mano de Miyazaki y yo sin saberlo), fui consciente de mi primer anime cuando vi Dr Slump.
Dr Slump es una serie loca como pocas por aquella epoca para mi. En la ETB se podía ver el anime de una niña robot con superpoderes, que vivia en Villa Pinguino donde superman era un villano que creaba problemas para intentar resolverlos y así que todo el mundo lo admirase, donde habia unos extraterrestres que tenian el culo en la cabeza y sufrian cuando se echaban un pedo porque las antenas eran su nariz y donde todo era muy subrealista. Algo muy nuevo para mi, todavia lleno de inocencia pero diferente a los fruitis, ferdy o calimero, los grandes exitos de los dibujos animados en TVE1.
Luego llegaron Bola de Dragon, con la misma estética y del mismo creador, y un poco más adelante City Hunter, Ranma 1/2 y otras muchas series que se fueron colando con la llegada de las televisiones privadas. Y aquí es donde empecé a buscar. Porque coincidió que cambié de centro de estudios, de mi escuela de pueblo al instituto de Alsasua, y entre mis compañeros, encontré a un chico que dibujaba, y conocía más que yo de qué iba el mundo del Manga. Me inicié en la lectura con cualquier cosa que caia en mis manos sin dejar los clásicos mortadelo y rompetechos, pero ya sabiendo que habia mas, mucho mas por descubrir.
Fue una época en la que tambien encontré TBO y Norma, dos tiendas ESPECIALIZADAS en comics, cosa para mi imposible... como iba a ser una tienda solo de comics? pues si, las habia y en Pamplona. Así que el poco dinero que tenía, lo iba ahorrando para comprarme cosicas y luego intercambiar con las pocas personas que sabía qu eles gustaba el manga. Me leia, veia o analizaba TODO lo que caia en mis manos. No habia suficiente material para desperdiciar.
Fue también cuando empezó el boom del manga, con los anuncios de los fasciculos de MangaMania, muy agresivos visualmente y que dejaban claro que no eran para niños... PERO SEGUIAN SIENDO DIBUJOS! y tuve que comprar el primer número con dos peliculones para mi, por diferentes motivos: AKIRA y Ninja Scroll. No entendí la mitad de las cosas, pero me gustaba. Visualmente me atraia un montón y me constó entender muchas cosas. Eso fue un reto, yo me consideraba muy listo, como no, y no podía enteder una peli de dibujos. Fue la primera revelación, el manga puede ser un reto intelectual.
Con estos fascículos y en un ambiente de instituto, también fue cuando encontré los primeros mangas y animes porno, Angel, Dragon Pink y Urotsukidoji fueron el primer contacto, y más sorpresas! el Manga puede tener de todo, desde las lacrimogenas historias de Heidi hasta el porno mas bizarro de Urotsukidoji.
Llegó la hora de ir a la universidad, y con esto, el acceso a INTERNET! de repente podías preguntar, navegar en foros, pedir consejo o listas de series sin pasar la "vergüenza" del cara a cara con algunos amigos de amigos de amigos que dicen que piensan que les gustan tambien los dibujos esos. Y empezó una carrera, bastante igualada, entre lo que encontraba y lo que podía ver. Digamos que seguía viendo todo lo que pasaba por mis manos, pero iba al límite. Mi primer salón del manga llegó este primer año, y como no, flipé a más no poder. Fui con mi amigo del instituto, viernes noche autobus, sabado salón y sabado noche autobus. Palizón y sonrisa.
Y en esto que estaba yo por la universidad, cuando en mis manos cae una revista de la casa de la juventud de pamplona donde hay un reportaje sobre un grupo de chavales que se juntan todas las semanas para hablar de mang. Y allí que me presenté un sábado y descubrí un grupo de mi edad (unos mas otros menos) que hablaban sobre los puntos de fuga de una viñeta. Me sonaba a chino y nunca me ha gustado dibujar, pero me pareció muy interesante. Iba todos los sabados y la rutina era poner una serie, llevar golosinas y aperitivos, y estar dos o tres horas viendo cosas frikis. Entre los asistentes se sumaba una colección impresionante de titulos y mucho interes. Y sobre todo, las puertas a sitios, foros, salones, concentraciones donde habia mucha gente para preguntar.
También fue mi primer contacto con los fanzines, ya que ellos publicaban un fanzine llamado myaku. Con las ganas que tenia, impulsé la publicación, me metí en el departamento de actividades culturales de la universidad hasta la cocina y monté diferentes cursos y actividades relacionadas con el comic y el anime en la universidad, para que nos financiaran la revista Myaku. Aquí descubrí el comic con carga politica, como Jim Rho, donde se narra la hipotetica guerra sucia del gobierno japones contra una resistencia a su politica tradicional, en un futuro donde la relación con el poder militar es muy tirante.
No os cabrá duda que en este grupo fue cuando cambió mi tendencia de leer todo. Ya no podía leer todo lo que me llegaba, tenía que filtrar, y esto era bueno y malo. Malo porque no podia verlo todo, era demasiado, y bueno porque solo veia lo que me interesaba, los temas más personales: ciencia ficción, humor, fantasia... Descubrí que el manga es únicamente una forma de expresión, que en japón está tan extendido como la narración escrita. Que el gobierno te puede plantar un aviso de peligro en el metro explicado en viñetas como una tira comica del manga, que hay libros de texto en Japón que son un comic manga... Y gocé como un enano buceando en lso origenes del manga, en la estética, los autores, la evolución y como se fue contagiando de europa y estados unidos sobre todo.
En fin, que para mi el Manga fue un descubrimiento de una nueva forma de expresión que me permitió seguir disfrutando de tebeos siendo adulto, sin reparos y con la mentalidad abierta. Solo tengo que seleccionar lo que quiero ver porque hay mangas y mangas, no todo es bueno y porque veas un manga malo no significa que el manga sea eso, el manga solo es un soporte.
Vimos capitulos de ebichu (que me impactó y lo tengo en la memoria como un anime curioso), dokurochan, chi, bobobo y trigun.
de Ana Muñoz
ResponderEliminarPara los que no vinisteis: lo que os perdisteis. Fue una sesión muy especial, Joste hizo un recorrido de cómo fue descubriendo el manga a través de su vida, muy interesante.
Además refuerza un poco lo que iba pensando últimamente después de Festival de Anime. El mundo japonés oferta actividades para una franja de edad que aquí se olvida. Esos años un poco especiales, desde los 15 en adelante, que si no sabes jugar al fútbol lo tienes muy complicado.
Lo que viene de allí es un gran abanico de posibilidades, no solo manga, animes, si no manualidades, moda...todo un mundo que atrapa y entretiene un montón.
Yo seguí a mis hijos ( estuvo más pillada Blanca) en esa aventura que iba descubriendo al mismo tiempo que ellos, a veces me asustaba porque era demasiada locura , pero siempre vi una salida en una época que tampoco me convencía lo que veía como salida en otras chavalicas ( generalmente el alcohol).
Ayer vi en Joste y en todos aquellos amigos con los cuales iba descubriendo el manga, a los pioneros de todo este movimiento del que ahora se han beneficiado tantos chavales, entre ellos mis hijos.
Por eso gracias Joste, por lo de ayer y por lo de hace años
A mí me gustó mucho, sobre todo me pareció muy interesante y me quedé con ganas de ver algún manga más. No es que todos me gustaran, el de los pelos me pareció buscar la tontería por la tontería, pero me pareció que la sesión se acercaba mucho a lo que yo me imaginaba al comienzo de Cineguchi, explicar por qué nos gustan unas pelis u otras. Me gustó especialmente el del gatico. También me parece muy interesante el texto completo de la presentación. Grascias Joste
ResponderEliminarUna sesión muy interesante y divertida,
ResponderEliminarInteresante por varios motivos, el primero de ellos conocer de primera mano qué llevaba a un adolescente en los 90 a acercarse al manga y las dificultades y alegrias que en esa búsqueda va encontrando.
Una experiencia en un mundo sin internet para todos, en el que había que buscarse la vida a base de contactos y conocidos, dando la cara sin ocultarse detrás de un teclado.
Y si esa experiencia adolescente te la cuenta un amigo, es mucho más interesante ya que de pronto le empiezas a conocer aún antes de ser la persona adulta que es ahora.
Y en segundo lugar, descubrir algunas series a las que nunca hubiese llegado por mí misma.
Durante la sesión pasé de la sorpresa a la indignación de ahí a las risas y la ternura. Sorpresa con todo, idignación con el rol de la mujer en Ebichu, risas y risas con Bo bo bo y ternura con un gatico glotón.
Muchas gracias Joste, fue un cineguchi de los que crean afición.
Jo, un mundo sin internet... parece mentira pero hace 4 días casi nadie sabia de qué iba eso, ni qué utilidad podia tener. Algo sin interes vamos.
ResponderEliminarMe alegra que os remueva algo por dentro. Tal como dije, las series que puse, no son ni las que mas me han gustado, ni las mejores ni las mas frikis, son las series que en cierto momento me marcaron y me han hecho entender cosas como que los manga pueden contener cualquier cosa, no son un genero en sí, sino un soporte.
Y ahora que teneis más info, el que quiera, ya puede buscar esa serie que todavia no sabe que existe pero que le va a encantar.