La herida no es una
película fácil, como fácil no es el personaje de Ana, una enferma
conductora de ambulancia que padece trastorno límite de la
personalidad o borderline. Ni a la protagonista ni al espectador se
le desvela en ningún momento expresamente cual es el problema de
Ana, pero su dolor e incapacidad para gestionar sus propias emociones
nos acercan a aquellos que padecen esta enfermedad. Una soberbia
Marian Álvarez es la encargada de montar este crudo retrato bajo la
dirección del debutante en el largometraje Fernando
Franco, montador de películas como Blancanieves. La cinta, rodada
casi en su totalidad en plano secuencia, nos arrastra junto con su
protagonista por los caminos de la incomunicación, la soledad y
sobre todo el dolor. El proyecto, en su inicio iba a tratarse de un
documental, pero el equipo, tras investigar sobre el tema y descubrir
que los pacientes empeoraban cuándo alguien se interesa por ellos,
optaron éticamente por convertirlo en una película de ficción, sin
perder un ápice de honestidad y verosimilitud. Asistimos impotentes
a la destrucción de la protagonista y su familia y cómo, a pesar de
toda esa angustia, se aferra a los leves destellos que le ofrecen las
relaciones con los otros, intentando entenderse a sí misma y hacer
su vida soportable. El resultado, una vivisección minimalista, pero
visceral y auténtica y un notable trabajo actoral de su protagonista
y de los actores de reparto. Obtuvo el premio del Jurado en el
Festival de San Sebastian, y Marian Álvarez fue galardonada con el
premio a mejor actriz. Una rara avis en el actual panorama
cinematográfico nacional.
Gracias por tu entrada, Angélica.
ResponderEliminarMe gustó la película. Retrata muy bien ese sin-vivir que sufren los TLP. Esos pasos del amor al odio instantáneos, abuso de sustancias, esa búsqueda del afecto auto-destructivo, esa ansiedad apenas calmada con la visión de la propia sangre...
Me gustó una de las lecciones: No hay daño más profundo que el de la ignorancia; el no escuchar, el hacer como que no pasa nada ...
No me da la vida para tanta peli!
ResponderEliminarZugarramurdi, only god forgives (Que donosti está plagado de carteles publicitarios de la peli!), el juego de ender, el mayordomo... no puedo con todo!
Joste, es que tenemos que ganar más disfrapintxos con su correspondiente abono Golem.
ResponderEliminarAnica, que alegra que también te gustara. Cuando salíamos del cine había dos mujeres discutiendo, una decía que la película era una grandísima mierda y que no pasaba nada, y la otra pobre, a la que sí le había gustado ¡todavía tenía que excusarse!
La peli nos cuenta muchas cosas, pero no hay un desenlace, la protagonista sigue en su pozo y, tal vez los espectadores consigan lo que es tan difícil en la vida real: intentar comprender a los TLP.
Bueno, yo me refería mas a tiempo que a pasta, aunque está ultimamente carisimo, es verdad.
ResponderEliminarA ver si prosperan inciativas como las del dia del cine, que aunque sean dias puntuales, llenan salas y permiten ir al cine sin empeñar un riñon.
Ayer ganó el goya Marian Álvarez. Me alegré un montón y espero verla en muchas más peliculas.
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