viernes, 1 de octubre de 2010

Forajidos (The Killers).


Forajidos (The Killers, 1946), es la adaptación a la gran pantalla del relato, con el mismo título, de Ernest Hemingway, por el director Robert Siodmak. Supuso el debut cinematográfico de Burt Lancaster que interpreta a Ole Andersen, El Sueco, un trabajador de la gasolinera de Summit, un pequeño y caluroso pueblecito de los profundos USA. Cuando dos matones aparecen por allí para liquidarlo El Sueco no parece sorprendido y tampoco interesado en salvar su pellejo.

Muerto Andersen, el detective Reardon (Edmon O'Brien) es el encargado por su aseguradora para encontrar a la anciana beneficiaria del seguro de vida del Sueco. Un asunto, aparentemente menor, pero que desata los instintos de Reardon que inicia una investigación que le llevará a descubrir cuales fueron los motivos del asesinato y quién era realmente Ole Andersenn.

Una joya en sí misma y, especialmente, para los amantes del cine negro. Contiene todos los ingredientes clásicos del género. Antihéroe, femme fatale (una Ava Gardner de lo más manipuladora y turgente en su primer gran papel), morales que no distinguen muy bien las fronteras entre el bien y el mal, misterios, lujuria, fatalidad, tiros, muerte y, además, boxeo. Los guantes y el ring del guión de Anthony Veiller y un anónimo John Houston (no pudo firmar por su contrato con la Warner) se ponen al servicio del director para ilustrar aún más gráficamente la mente atormentada del personaje de Lancaster.

La adaptación del relato es brillante y prácticamente literal en el primer cuarto de hora de metraje. Especialmente en la secuencia inicial, lo mejor de la película. Después, finalizado expresamente Hemingway, el film recrea con flash backs subjetivos los andamios sobre los que, libremente, los guionistas interpretaron que el escritor había construido su historia, utilizando el personaje de O'Brien como un invertido hilo de Ariadna que en lugar de sacarnos del laberinto nos introduce en él para ayudarnos a descubrir sus engranajes. El planteamiento del argumento no supuso una novedad, Welles ya había parido su 'Ciudadano Kane', pero el resultado del puzzle -acompañado de un ritmo narrativo ágil- resulta más que satisfactorio, aunque subvierta el espíritu del cuento original.

Una fotografía hermosa, con fuertes claroscuros propios del blanco y negro del género y la música de Miklós Rózsa completan la atmósfera de The Killers.

Al menos otras dos versiones del cuento del escritor americano se han llevado a la gran pantalla (una de ellas dirigida en su corto debutante Andrei Tarkovski -con aparición estelar del director soviético- y otra de Don Siegel, 1956 y 1964 respectivamente), ¿qué tendrá la base del iceberg del viejo borracho, a parte de grandes dosis de alcohol, que tanta atención nos reclama?

Aquí os dejo el tráiler de la época.


9 comentarios:

  1. He llegado a este blog por pura casualidad, y he de decir que la reseña me ha resultado de lo más interesante. De hecho, ya había visto la película, pero tus comentarios han hecho que la vea desde una perspectiva nueva. Así que pienso volver a verla. Cuando lo haga pasaré por aquí para comentarla.
    Felicidades por el blog y muchas gracias.
    Ricardo
    Ricardo

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  2. Gracias a tí Ricardo por participar. Es una suerte que la casualidad te haya traído hasta nuestro blog, esperamos volver a tenerte pronto por aquí con tus comentarios sobre la película, seguro que son muy interesantes.
    Marijo.

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  3. Entro hoy... Lo seguiré, aunque no creo que aporte demasiado...

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  4. Lo que más me ha gustado es el sonido, la música que acompaña el comienzo, el ruido de los coches, las voces, la subida de tensión musical en algunos momentos; suena a misterio, intriga y tragedia por traición.

    La pareja protagonista (El sueco y Kitty) son tan guapos y sensuales que mirarlos hipnotiza y me hacia olvidar que debía leer los subtítulos para seguir la trama, aunque en ocasiones no lo hacia, porque todo era tan previsible y exagerado con el lenguaje corporal, y con los gestos de la cara, que podría haber sido una película de cine no mudo, sino no verbal, sin perder un ápice de interés.

    Gracias Xabi por proponerla.

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  5. Me encanta el cine clásico. Tal vez es porque me evoca mi infancia, cuando en la tele echaban montones de películas de cine clásico y hasta programaban ciclos de las más grandes estrellas del cine.
    Quizás en uno de estos ciclos de antaño habría visto Forajidos, porque cuando hace dos semanas me dispuse a verla me sonaban muchas escenas e incluso podía anticipar lo que iba a suceder en ellas.
    Sin embargo, no debió impactarme tanto como para recordar que ya la había visto con anterioridad, o tal vez fuera que el argumento es muy recurrente en el cine: el hombre bueno que se ve arrastrado por un fatal destino a manos de una mujer fatal (valga la redundancia).

    La primera escena es muy buena, engancha al espectador con gran tensión y sorprende el final de la misma, creando la intriga de quién es el protagonista, qué ha hecho y porqué está ahí.

    Resumiendo, no es una película que tendré entre mis favoritas pero se ve a gusto y me alegro de que haya sido una de las elegidas para nuestro cineguchi.

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  6. La peli es entretenida. Es la típica de cine negro clásico en blanco y negro con algún tono de gris pero a mi entender tiene varios fallos por la que no llega a ser una magnífica película. La presentación de la película, aunque es impactante y sirve para empezar a engancharte, no tiene razón de ser en cuanto al argumento. Los sicarios llegan al restaurante y preguntan por Burt Lancaster, cuando en verdad ya saben dónde trabaja por lo que el secuestro de los personajes del bar sobra. Si pensamos con lógica y fuesemos unos asesinos, vigilaríamos la gasolinera y el pueblo para averiguar sobre Burt Lancaster, siempre de una manera discreta para no llamar la atención, si no algún lugareño podría avisar a la policía.
    Luego la descripción del protagonista a través de flashbacks de personas que lo conocieron está muy bien y nos van descubriendo las distintas facetas del protagonista. Pero aquí es donde vuelve a fallar porque en vez de profundizar sobre la relación íntima de Ava Gadner como mujer manipuladora y Burt Lancaster, solo nos deja pinceladas que nos dicen que estaban liados, sin ahondar en una de las grandes bazas del film. Supongo que si el montaje hubiese sido lineal en el tiempo esta relación se podría haber contemplado mejor. Y hay que recordar que toda buena película de cine negro necesita el personaje de una mujer fatal bien desarrollado. A otras películas me remito como Perdición del gran Billy Wilder o la mujer del cuadro protagonizada por Edward G. Robinson. Solo en el final del film se muestra lo mala y pérfida que es el personaje de Ava Gadner que es cuando la secuencia temporal de la película es lineal.
    En conclusión, a mi gusto, esta película no deja de ser más que una correcta peli de cine negro.
    Anicómetro: 6,5

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  7. Este fin de semana ha sido un finde cinéfilo, hasta 5 pelis creo que he visto de viernes a domingo.
    Esta ha pasado sin pena ni gloria, para ser sincero, ni siquiera he podido terminarla. A veces me pasa, una película impresionante, buenísima, si estoy solo y es en B/N tal vez pierde interés para mi.
    El caso es que la vi en casa, y aunque comencé con ganas ya que la escena del restaurante me gustó y me enganchó, cuando ya comienzan a hacer los flashbacks comienzo a aburrirme y... al final paso lo que pasó.
    Y eso que dando gracias al monstruo espaguetti volador la visualicé en versión original porque si es en castellano tal vez ni la primera escena me hubiese enganchado.
    Estoy de acuerdo con Marivi en la utilización de los efectos sonoros, eso es un punto a favor. Pero el cine negro clásico, no se si me engancha demasiado... necesito algo más para que me llame la atención. Por ejemplo el tercer hombre (que esta la vi en el cine) me gustó muchisimo!
    Lo siento, mi puntuación final es suspenso para esta peli.

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  8. Tal vez la culpa la tuvo la saturación de cintas... aunque esta fue la tercera o segunda que vi de las 5 y las ultimas me gustaron en general.

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  9. Bueno, por fin comento, porque, aunque la vi hace un año, nadie, nadie, se digna a dejármela para que la relea. (Y veo que aquí hace falta un poco de claridad:)

    A mi la película me gusto, aunque menos de lo que esperaba habiendo sido presentada en un ciclo como un clásico de cine negro. Le doy un 7.

    Lo mejor para mí es la escena del principio. Al contrario que Anica, sí creo que tiene sentido: Lo esperan en el bar donde suele ir a cenar para pillarlo desprevenido y confiado (pues se supone que están los dueños) en lugar de buscarlo en otro sitio donde pueda estar más atento.
    Era un recurso muy habitual para los asesinatos, como sabrás a poco que haya seguido el género negro, y estos asesinos, siendo unos clásicos, se limitan a seguir la norma.
    Luego, Burt Lancaster está muy bien en su papel de desesperado y también una tan joven Ava Gadner.
    Ahora lo que no me gusta: La trama posterior y los personajes me parecen esteriotipados. Me parece que se toman estereotipos del genero para hacer un ejercicio de estilo más próximo al expresionismo alemán del que provenía el director. (No es que yo sepa lo que es el expresionismo alemán, pero lo he leído por ahí y queda bien decirlo.)
    En definitiva, me parece que falta la hondura humana, el desengaño todavía con una pizca de idealismo, ironizado y gracias a ello vivo, de los grandes congtrahéroes de la novela negra.
    Incluso en la idea de dejarse matar desencantamente veo más un recurso de Heminway por las situaciones extremas que un interés real por entender el personaje. (Y eso que el cuento está muy bien; pero es que a Heminway le tengo cierto paquete.)
    Así, que, en definitiva, una historia interesante, bien desarrollada y contada con cierta maestría expresiva, pero falta de verdadera hondura o interés por y en los personajes. Un 7. (Menuda caña que le he metido.)
    Pero está muy bien, eh?
    Ricardo

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